«La LIJ vino a buscarme un día en que
estaba aburrida en casa».
Foto: Marina Caccia |
Con una vasta trayectoria literaria y una intensa labor de
promoción de la lectura, Anna Lavatelli es un referente indispensable en el
mundo de la literatura infantil y juvenil. Bajo el influjo de autores como
García Márquez y Gianni Rodari, sus personajes se mueven con naturalidad entre
lo cotidiano y lo fantástico: niños que nacen con una hermosa cola verde a la
que le dan múltiples usos cuando aprenden a caminar o le temen a la oscuridad,
una niña que es capaz de oler la maldad de un hombre que quiere arrebatarle la
casa a su familia, una señora tan gorda que no puede salir de su departamento y
debe luchar contra la soledad hasta que alguien le regala una alfombra mágica
que la hará sentirse ligera como una pluma. Anna nos revela, a través de sus
historias, que los mejores argumentos tal vez están más cerca de nosotros de lo
que pudiésemos pensar y, valiéndose de la imaginación, los hace volar hacia
desenlaces insospechados, hacia la esperanza.
Si bien Anna nació en Italia y vive ahí, frecuentemente visita
nuestro país, que también es muy suyo desde hace muchos años, cuando conoció a
su esposo peruano e inició una hermosa historia de afectos y libros con el
Perú. Con motivo de su última visita, compartimos una amena charla con ella y
descubrimos algunas de las claves que subyacen a su consagrada trayectoria:
amor por la lectura, pasión por la escritura, compromiso, respeto absoluto por
el público infantil, preocupación por la literatura como forma estética,
búsqueda de originalidad y exploración constante de nuevas formas de narrar.
¿Quién dijo que escribir para niños es fácil?
Llevas más de 30
años como autora de LIJ. ¿Por qué escogiste escribir para niños?
Fue más bien la LIJ que vino a buscarme, un día en que
estaba aburrida en casa. Recuerdo que me senté en la mesa, con un vacío
adentro. Me puse a escribir y me salió un cuento para niños. No era gran cosa,
el cuento en sí, pero fue un lindo pasatiempo y quise repetir la experiencia,
una y otra vez. Poco a poco, mi pasatiempo se transformó en una verdadera
pasión. Allí entendí que escribir para los niños y los jóvenes era
comprometerse con un trabajo de responsabilidad; y visitar su mundo, sus
perspectivas y sus vivencias, un reto encantador.
En tu opinión, ¿qué
función cumple el autor de LIJ en la sociedad?
El escritor de LIJ es la persona que cumple con la hermosa
y desafiante tarea de hacer que los chicos se enamoren de la lectura, haciendo
que descubran la poderosa fuerza emocional y la belleza creativa de las
palabras, así como la posibilidad de acercarnos con capacidad crítica a nuestro
entorno social.
¿Qué tipo de
historias buscas ofrecerles a tus lectores?
Sobre lo que más me provoca escribir ―y lo que más me
divierte también― son los pormenores y los acontecimientos que pasan en la vida
real. Los pequeños eventos cotidianos pueden esconder valores universales y
adquirir una gran resonancia, si logramos investigar lo que hay por detrás,
reconstruir ―a través de la imaginación― el ambiente y las situaciones en que
ocurrió. El uso de la ficción, en estos casos, es una forma de investigación
donde la verosimilitud termina siendo más verdadera que la verdad misma, o sea
más transparente e inteligible para los jóvenes lectores. Eso me encanta.
Como buena seguidora
de Rodari, la fantasía juega un papel importante en tus historias, a pesar de
que estas también parten de lo cotidiano y lo real. ¿Qué papel consideras que
cumple la fantasía en la LIJ?
Creo que hoy en día tenemos que darle un significado nuevo
a la fantasía. En su Gramática de la
fantasía, Rodari nos enseñó a jugar con las palabras, sacando de ellas
ideas para escribir cuentos y (sobre todo) para hacer hipótesis y pensar que lo
imposible tal vez es solamente lo que no se ha intentado todavía. Este «juego»
creativo valió como una muestra de potencialidades, pero seguir repitiéndolo de
la misma manera sería anular su fuerza original. La fantasía ahora es, para mí,
la capacidad de explorar los lugares de lo que es posible, mezclando lo que
pasa a diario con lo inusual y lo inesperado, con lo que nos gustaría que
cambiara, aunque parezca difícil lograrlo. La hipótesis literaria es el terreno
donde trabajo con mi imaginación.
Antes has
declarado que naciste en un pueblo rural y tus primeros años de vida estuvieron
alejados de los avances tecnológicos de la actualidad. ¿Qué tanto influye
en tu escritura haber vivido estas dos épocas tan diferentes entre sí?
Es cierto, soy una inmigrante digital, que no tiene una
ciudadanía bien asentada dentro de este nuevo mundo. El cambio más importante
que puedo registrar en mi escritura ha sido una modificación del estilo:
párrafos más cortos, diálogos más rápidos, brevedad en las descripciones y uso
moderado de adverbios y adjetivos. Quiero precisar que no ha sido una mera
simplificación del texto, todo lo contrario. He trabajado y sigo trabajando en
un estilo sobrio, denso, preciso y profundo, donde las palabras tengan más
sentido. La comunicación en las redes es casi siempre banal, confusa, necia y
repetitiva; entonces un autor tiene que salvar las palabras de su posible
pérdida de sentido.
Desde que empezaste
a publicar, ¿has notado alguna evolución en el público infantil?
Muchos son los cambios en las nuevas generaciones, debido
a un contexto que empuja y acelera la transformación del sistema de vida. Pero,
por dentro, el proceso psicológico del crecimiento de la persona, en términos
de afectividad y formación del carácter, no me parece muy cambiado. En el
proceso formativo de un joven, quedan las inquietudes de siempre, las mismas
grandes preguntas que no tienen respuesta.
Desde tu
experiencia, ¿en dónde radica la complejidad de escribir para niños?
En lo personal, considero que esa
complejidad radica en la dificultad de descubrir lo que más impulsa a un chico
a seguir leyendo el libro que tiene en sus manos; qué es lo que espera
encontrar más allá del cuento en sí. Y, además, de qué manera puedo yo acercarme
a mi lector, captar su atención sin renunciar a la calidad literaria del texto,
sin dejar de ser auténtica en lo que escribo.
Agradecemos a Anna Lavatelli por
su interés en conocer iniciativas relacionadas con la promoción de la lectura
sean ya consagradas o en proceso de desarrollo, como es nuestro caso. Valoramos
mucho sus consejos y sus palabras de aliento para este blog.
Lo que debes saber sí o sí
Para conocer más sobre la
trayectoria de Anna y sus libros, puedes visitar su web desde aquí.
Si quieres seguir leyendo
Te recomendamos los siguientes
libros de Anna:
La cola verde (Norma)
Huesos de dinosaurio (SM)
El cañon Boom (Santillana)
Ligera como una pluma (Norma)
¿Dónde encontrar sus libros?
La cola verde (Norma)
Disponible a S/ 24.00 en Crisol y Communitas.
Huesos de dinosaurio (SM)
Disponible a S/ 32.00 en los puntos de venta de plan lector de SM. Pueden consultar aquí.
El cañon Boom (Santillana)
Disponible a S/ 32.00 en los puntos de venta de Santillana. Pueden consultar aquí.
Ligera como una pluma (Norma)
Disponible a S/ 28.00 en Crisol y Communitas.
Gracias, Daniela. Lo que más me sorprendió fué la manera con que supiste abrir un camino entre mis obras y mostrarme lo mucho que le debo a Gabriel Garcia Marquez y Gianni Rodari.Lo que más me gustó fué que tus preguntas hicieron que yo reflexionara sobre mi trabajo y mis valores como nunca habia hecho hasta ahora.
ResponderEliminarQuerida Anna, me emocionan tus palabras. Fue un gusto poder charlar contigo. En cada respuesta transmites la seriedad y el profesionalismo con que concibes tu labor como autora de libros para niños y jóvenes. Ese respeto a tu público es admirable y un ejemplo a seguir para quienes recién empiezan. Un abrazo.
ResponderEliminarDanielita, me encanta tu blog. Quisiera salir corrriendo a comprar estos libros para mi niño. Me podrías decir qué libros sugieres para un bebé de año y medio? Besos
ResponderEliminarHola, Karla. Me alegra mucho tu comentarios. ¡Muchas gracias! Para un bebé de año y medio sugiero libros de páginas duras y puntas redondeadas, de formato pequeño para que lo pueda manipular sin problemas. De autores peruanos, te recomiendo "La banda" y "Vamos a..." de los Cocoretto, editados por Polifonía. Ellos también distribuyen algunos libros del sello Amanuta como "Yo tenía diez perritos" o "Estaba la rana", que recrean gráficamente las canciones infantiles que ya conocemos y que le puedes cantar a tu pequeño. Ekaré también tiene una colección similar llamada Clave de Sol. Combel tiene una colección de libros con texturas sobre los animales, los colores, etc. Ekaré y Combel son distribuidos por Íbero Librerías. Espero que la información te sea de ayuda. Un abrazo. Acá estamos para cualquier recomendación que necesites.:)
EliminarMuchas gracias, Dani. Iré corriendo a Íbero porque las canciones también gustan tanto a los bebés, qué mejor verlas en imágenes!!! Gracias y besitos.
ResponderEliminarDe nada, Karla. Las canciones suelen ser el primer acercamiento del niño a la musicalidad de la literatura. Que disfrutes los libros. Un abrazo.
EliminarDe nada, Karla. Las canciones suelen ser el primer acercamiento del niño a la musicalidad de la literatura. Que disfrutes los libros. Un abrazo.
EliminarExcelente entrevista, conocer más de la escritora Anna me ayudó muchísimo para hacer una tarea de mi hijo de 9 años.
ResponderEliminarHola, me alegra mucho leerte. La obra de Anna es realmente estupenda. Pronto la entrevistaré en el marco de la feria Lima Lee. Ojalá tú y tu hijo nos puedan ver. Un abrazo.
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